En Huellas, propuesta de pastoral juvenil de la Compañía de Jesús en Venezuela, nuestra insistencia con los jóvenes consiste en invitarles a transformar la crisis en oportunidad de desarrollo de capacidades. Porque, en la misión de evangelización y apostolados nos ha estado inspirando, por un lado, la escena evangélica de la cura del paralítico (Mc 2, 1-12), y por el otro, la parábola de los talentos (Mt 25, 14-30). La primera nos invita a abrir “grietas”, nuevas alternativas, en la emergencia humanitaria venezolana para que las juventudes se movilicen en una vida digna y plena; mientras que la segunda, nos emplaza a soñar e impulsar experiencias juveniles en las que los nóveles líderes exploren, cualifiquen y pongan en prácticas su vocación y talentos personales.
Gracias a un equipo de 48 colaboradores, 714 voluntarios y al apoyo de aliados eclesiales, como Jesuit en Mission, el itinerario formativo en liderazgo cristiano, social y ciudadano se ha mantenido en medio de la adversidad del país, beneficiando a 8.564 jóvenes asociados, provenientes de parroquias eclesiásticas, colegios y universidades católicas y centros comunitarios, presentes en 57 comunidades.
En sentir con la Iglesia, la realidad del país y ante la pandemia, hemos enfocado los temas formativos en resiliencia y espiritualidad, sinodalidad, apostolados sociales y ciudadanía juvenil. En el año pasado, la mayoría de esas actividades formativas fueron en modalidad on line, por medio de aplicaciones y redes sociales; mientras que las 36 jornadas de asistencia humanitaria las realizamos en comunidades vulnerables en alianza con otras organizaciones de la iglesia y sociedad civil y con todos los cuidados de bioprotección para los jóvenes-adultos con más experiencia y herramientas misioneras del movimiento. Atendimos a 1.677 personas, entre niños, madres y personas de tercera edad.
Los encuentros formativos, quincenales y trimestrales, on line, a nivel nacional, han ofrecido el contexto vivencial para que los jóvenes implicados fortalezcan habilidades de voluntariado humanitario y educativo, talentos musicales, comunicación digital y trabajo productivo, que se pueden visibilizar en las redes sociales de Huellas Venezuela, en Facebook, Instagram, Twitter, en el blog institucional y en el canal Youtube llamado Huellas Musical.
Testimonios juveniles que nos inspiran a seguir en movimiento: “Yo siempre he estudiado en Fe y Alegría, pero nunca me había llamado la atención eso de Huellas y de la Iglesia, pero un día me dijeron: ven que vamos a grabarte en un video para que partícipes en un casting musical. Hice entonces mi primera audición con una canción llanera y de allí me seleccionaron… Esta experiencia ha sido muy bonita. Llegó en un momento en el que yo estaba muy deprimido porque mi mamá se había ido del país, se fue a Brasil, pero con esta experiencia me volví a animar y me siento nuevamente en familia, todos cantamos y nos apoyamos” (Testimonio de un joven implicado en la grabación del CD musical, 19 años, de Ciudad Guayana).
“Me gustó mucho poder compartir con distintos jóvenes de toda Venezuela y darme cuenta que hay jóvenes que siguen
apostando por este país, aportando grandes ideas de emprendimiento que pueden transcender barreras” (Testimonio de un joven implicado en el campamento misión trabajo productivo, 21 años, de Barquisimeto).
“fruto de la experiencia de ejercicios llegue Como a descubrir finalmente un pedazo de mí que desconocía, sentimientos que se aclararon, decisiones que se facilitaron, siento que crecí como persona y en fuerza de voluntad. En los ejercicios espirituales admiré y escuché a un Dios dulce y amoroso, un Dios que perdonó mis pecados y que me recibió en su casa como “la hija prodiga”, un Dios que entregó a su hijo por cada uno de nosotros para el perdón de nuestros pecados y para que estemos aquí hoy. Gracias” (Testimonio de una joven implicada en lo ejercicios espirituales de la etapa formativa Huellas Azules II, 17 años, de Mérida)
De acuerdo a todo lo anterior, en la pasada Eucaristía del 31 aniversario del Movimiento Juvenil Cristiano Huellas, el nueve de noviembre de 2020, terminábamos diciendo: “De todo corazón, Señor, te damos gracias”.
Autor: Robert Rodríguez, SJ.
“Me gustó mucho poder compartir con distintos jóvenes de toda Venezuela y darme cuenta que hay jóvenes que siguen
apostando por este país, aportando grandes ideas de emprendimiento que pueden transcender barreras” (Testimonio de un joven implicado en el campamento misión trabajo productivo, 21 años, de Barquisimeto).
“fruto de la experiencia de ejercicios llegue Como a descubrir finalmente un pedazo de mí que desconocía, sentimientos que se aclararon, decisiones que se facilitaron, siento que crecí como persona y en fuerza de voluntad. En los ejercicios espirituales admiré y escuché a un Dios dulce y amoroso, un Dios que perdonó mis pecados y que me recibió en su casa como “la hija prodiga”, un Dios que entregó a su hijo por cada uno de nosotros para el perdón de nuestros pecados y para que estemos aquí hoy. Gracias” (Testimonio de una joven implicada en lo ejercicios espirituales de la etapa formativa Huellas Azules II, 17 años, de Mérida)
De acuerdo a todo lo anterior, en la pasada Eucaristía del 31 aniversario del Movimiento Juvenil Cristiano Huellas, el nueve de noviembre de 2020, terminábamos diciendo: “De todo corazón, Señor, te damos gracias”.
Autor: Robert Rodríguez, SJ.
